NUNCA DIGAS HUBIERA A LO QUE NO HICISTE EN EL PASADO, EL HUBIERA NO EXISTE Y LAS COSAS PASAN POR ALGO

miércoles, 14 de septiembre de 2011

Volviendo a sentir...

Tiempo, nada más que horas que se hacían viejas
minutos que corrían, segundos q morían sin cesar
latidos que alcanzaban la velocidad de la luz
sin detenerse en ningún instante
tratando de ocultar su trepitoso sonar
por no sobresaltar del pecho, de no salirse de control
midiendo la voz, cuidando las palabras
trabajando garganta y corazón, sin intervenir la razón
sin escuchar en algún momento la lógica del cuerpo
respetando los gritos sinuosos y abatidos de aquella sensación
que rebelaban mas allá de un sentir
que deban a conocer una batalla campal en el centro de mi existir
coloreando el rostro de un tenue rojo carmesí
con las manos temblorosas por el estallar de la guerra interna
contando lentamente aquellos minutos de paz
que cortaban el oxigeno para poder respirar
que arrebataban las ganas de introducir aire
sintiendo por momentos pequeños la belleza del cielo
en compañía, totalmente faltante de soledad
viendo como moría a deceso aquel mal sentimiento
y como renacía ese sentir enterrado vivo
pero que salía como si fuese nuevo, de sus cenizas de tristeza
de su ataúd de nostalgia
rompiendo la barrera del silencio,
se introdujo de nueva cuenta en mi
dando a demostrar otra razón para que florecieran los nervios
causando una inevitable sonrisa en mis labios
un brillo en mis ojos que pareciera que se había apagado
pero no fue así
seguía todo aquél buen sentimiento vivo
mas hasta ahora encontró un nuevo fin para volver a salir
lo que en horas se convirtieron en segundos eternos
lo que en instantes fueron reacciones de desconocimiento
ahora comprendo que fue el nacimiento de aquello que estaba muerto
volvió a surgir lo q estaba perdido
estremeció la tierra, estremeció mi cuerpo,
ahora sé que es capaz de llevar la batalla hacia afuera
con tal de conseguir lo que tanto anhela
tan capaz de desenvainar la espada y luchar de nuevo
y en unas cuantas horas esto se poseyó de mi conciencia
en poco tiempo ya ha logrado controlar mis sentidos
solo obedezco, a lo que supone que ahora siento
solo pongo atención a las ordenes de mi general
mi capitán, mi corazón, que desde ayer no ha dejado de gritar
que encontró una nueva razón para amar...

No hay comentarios:

Entradas populares